Unión fue goleado por Mushuc Runa en Ecuador y agudizó sus crisis deportiva

La derrota 3-0 ante Mushuc Runa por la tercera fecha del Grupo E de la Copa Sudamericana, dejó a Unión en una posición comprometida pensando en la clasificación, ya que ahora deberá ganar los dos partidos que le restan como local y buscar sumar en la última jornada frente a Cruzeiro en Belo Horizonte.
Fue otro partido con posesión, pero sin profundidad. El Tate volvió a mostrar uno de sus sellos en esta copa: el dominio estéril. Tuvo el control y precisión en los pases, pero le faltó claridad en los metros finales. La mira sigue torcida y, con poco, cualquiera lo lastima.
Los números de Unión ante Mushuc Runa
Las estadísticas reflejan una tendencia repetida: 65% de posesión y 76% de precisión en los pases, pero sin eficacia. El elenco del Ponchito fue más ambicioso y letal, porque al cabo de 19 remates, cinco fueron al arco y, tres de ellos, los goles de la victoria para seguir como líder con puntaje ideal.
Los números del partido entre Mushuc Runa y Unión.
Con apenas tres puntos en tres fechas, Unión está obligado a ganar sí o sí en el 15 de Abril frente a Palestino y Mushuc Runa, y luego viajar a Brasil a buscar el milagro ante Cruzeiro.
El margen de error es prácticamente nulo y será clave resolver lo del entrenador para tener las cosas y soñar, porque en el Apertura ya quedó fuera de carrera.
Los refuerzos en Unión que no reforzaron
Sin embargo, luego de 18 partidos oficiales, la realidad indica que ninguno de los nueve futbolistas que llegaron estuvieron a la altura de la circunstancias, a excepción del arquero Matías Tagliamonte quien atajó dos partidos y se mostró seguro.
Incluso algunos de ellos casi que no jugaron y los demás, cuando lo hicieron defeccionaron. El defensor Gastón Arturia ni siquiera sumó minutos, en tanto que José Angulo, apenas disputó 45 minutos y se lesionó.
Por su parte, en el caso de los mediocampistas, si bien tuvieron mucha participación, ninguno de ellos se destacó. Más bien, sumaron más actuaciones malas que buenas.
La realidad indica que Ezequiel Ham no jugó como lo hizo en Independiente Rivadavia, Julián Palacios tuvo pocos minutos y más allá de algunos destellos no se consolidó, en tanto que Franco Fragapane jugó mucho, pero decepcionó en la misma medida.
Mientras que Mauricio Martínez, quien parecía ser el refuerzo más importante, no rindió de acuerdo a las expectativas generadas. Y si bien ahora como defensor jugó mejor que como volante, el balance no es positivo.
Y los delanteros están más que en deuda, lo de Agustín Colazo es realmente muy pobre. No marcó goles ni tampoco incidió cada vez que le tocó sumar minutos. Por ello, en los últimos partidos fue perdiendo terreno.
En tanto que Marcelo Estigarribia, por el cual la dirigencia hizo un esfuerzo económico importante, apenas marcó dos goles, uno de ellos en Copa Argentina ante Colegiales.
Pero claramente, desperdició mucho más de lo que convirtió. Estuvo errático en la definición y además se perdió un par de cotejos por lesión.
Así las cosas, en medio de una crisis futbolística que lo tiene lejos de los objetivos planteados, los refuerzos en Unión no reforzaron nada, más bien, debilitaron al equipo.
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